domingo, 5 de septiembre de 2010

11 - El tubo de escape

Cuando traje la moto a casa, debido a mi ignorancia, pensaba que el tubo de escape quedaría perfecto simplemente limpiándolo con una esponja de alambres (nanax) y vitroclean, pero una vez desmontado el tubo de escape me he vuelto a desmoralizar. Y es que aparte de lo oxidado que se encuentra el elemento en cuestión, presenta un bollo en la parte de abajo del mismo.  Y hasta el momento de desmontarlo de la moto no me había dado cuenta del "pequeño" detalle.

Así que una vez desmontado y sentado frente al ordenador, busco en el GOOGLE como reparar bollos de los tubos de escapes, y aparecen varias soluciones caseras al mismo.

La primera solución, según la leí en el foro de "la maneta" era el hacer un agujero en la zona opuesta a donde está el bollo, luego  con una varilla ir dando golpes hasta que estuviese todo en su sitio.

Para este sistema el problema que le veo es que luego hay que tapar ese agujero, y lo veo un poco delicado.

La segunda solución era el meterle unos tapones,  a ambas partes del tubo de escape, llenándolo previamente de agua. Luego se mete en el congelador y se va comprobando el estado del tubo cada cierto tiempo para que no reviente por alguna parte.

El problema que le veo a este sistema es que mi congelador no da para tanto, y es un proceso relativamente lento.

La tercera solución que daban ha sido la que mas me ha convencido. Para ello necesitamos un par de tapones, inyectar aire a presión dentro del tubo (a través de uno de los tapones) y con un soplete ir calentando la zona del bollo.

Ha sido como magia. Al calentar al rojo la zona y meterle aire a presión (unos 2 bares en mi caso, regulándolo mediante un manómetro) se podía observar como el bollo iba desapareciendo poco a poco.

La terminación dista bastante de ser profesional, pero puesto que va a estar en una zona donde no se ve, tampoco es que me importe demasiado. De todas formas supongo que al estar el bollo iniciado en una zona de empalme y nervios va a ser imposible mediante esta técnica (o las anteriores) el dejar un resultado perfecto.

Detalles paso a paso.

Para desmontar el tubo de escape primero he utilizado el "útil para tuercas de escape" que me fabriqué anteriormente.
Este útil encaja perfectamente (o casi perfectamente) en la tuerca en cuestión.

 Después se quita el reposapiés del acompañante y el tubo de escape ya está fuera.


En este punto es cuando me dí cuenta del bollo que tenía el tubo de escape, así como la cantidad industrial de óxido que contenía tanto el tubo como el codo del escape.

         

Reparar el bollo del tubo de escape.
Para la reparación he procedido según las indicaciones de la tercera solución: Aire a presión y soplete.

Para que el aire no se salga he tenido que improvisar dos tapones, y en uno de ellos he puesto un racord para meter un tubo de aire a presión, regulándolo mediante manómetro a 2 bares.

Los tapones los he improvisado reciclando unos tubos de hierro que he enfundado con plástico termoretractil, y para que no salten cuando meta aire los sujeto mediante un alambre de acero inoxidable.

    

Luego sujeto el tubo de escape en un tornillo, de un banco de trabajo, le doy aire y comienzo a calentar con el soplete.

A los 20 minutos este es el aspecto que tenía el bollo


Y un poco mas tarde se que da de esta forma.
      

Como se puede observar se queda un pequeño desperfecto en la zona del nervio del tubo de escape, pero no he sido capaz de eliminarlo. De hecho al insistir tanto en esa zona, esta ha comenzado a algo que yo llamaría como proceso de "ebullición" (a falta de palabras mas técnicas que obviamente desconozco) y he parado de meterle calor para no fastidiarlo demasiado. Se puede observar como ha aparecido un pequeño "crater", que tendré que lijar, junto el nervio.

Desgraciadamente no puedo continuar con el "desbollado" del tubo de escape porque como este se encuentra junto las soldaduras de unión entre las partes del escape, al parecer por diferencia de temperatura entre ambas partes se ha hecho también un pequeño agujero justo donde debería de estar soldado, por lo que en este momento se escapa el aire por esa zona. Evidentemente este bollo estaba en una mala zona, simplemente de momento no me preocupa porque como he dicho antes se encuentra en una zona donde no se puede ver. Vamos que a menos que alguien se ponga debajo de la moto, estos pequeños detalles no se van a ver. Ahora simplemente intentaré soldar de alguna forma esta pequeña grieta.

En otro orden de cosas, donde sí que voy a tener problemas es en el codo del escape. Al principio, y debido al óxido y al hollín que tenía este no pude observar nada anormal en el mismo. El problema emergió cuando con el cepillo eléctrico quité todo ese óxido. Y es que al parecer el tiempo ha hecho de las suyas, y el tubo se encuentra totalmente picado. Como expliqué en el foro de "la maneta" se encontraba como un chiquillo lleno de varicela. Se verá mucho mejor si observáis las fotos que he colgado.

   

Pues eso, una imagen vale mas que mil palabras. Bueno, en resumen, que según la opinión de la gente que sabe evidentemente mas que yo, esto no tiene solución, y tienen razón, es mas barato comprar un codo nuevo que salvar lo insalvable, así que de momento no lo voy a tirar, por si tardase en encontrar o conseguir uno nuevo y cromado.

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